Si hay algo realmente valioso en esta vida es tu tiempo.
Cuando llegue tu hora no se te concederá ni un minuto más.
Y tu viaje habrá terminado.
Date el permiso de SER TÚ.
No vivas la vida de nadie.
Vive la tuya.
No te compares.
Nadie jamás será como tú.
Eres único.
Aprovecha esa «milagrosa» ventaja para triunfar.
Busca en tu interior la diferencia.
Porque existir, existe.
Y es la que te conducirá hacia las estrellas.
No te maltrates.
No te lo mereces.
Aunque te hayan hecho creer lo contrario.
No te exijas ser perfecto.
No lo necesitas.
Sólo necesitas ser tú mismo para ser grandioso.
No te culpabilices.
Todo pasa por alguna razón.
Perdónate.
No supiste o no pudiste hacerlo mejor.
Si no, no te quepa ninguna duda de que lo habrías hecho mejor.
No maldigas a tu sombra.
No está para que la maldigas ni la rechaces.
Está para que la transformes.
Acéptala y ámala porque ella te conducirá a la luz.
Valora el instante.
No lo volverás a tener.
Ámate y háblate bien.
Es lo único que depende de ti y te llenará de poderosa energía.
Valora todo lo que has hecho en tu vida.
Y agradece todo lo que tienes.
Si lo pierdes te darás cuenta del valor que tenía y no le dabas.
Visualiza tu sueño.
Y date el gustazo de ir a por él.
Quizá no lo consigas.
Pero sólo por el hecho de intentarlo, habrás alcanzado las estrellas.
Si tu vida te ahoga.
Rompe tus esquemas y ponte a volar.
Sal de tu zona de confort y empieza a caminar.
El miedo sólo está para vencerlo.
Mentalízate de que para cambiar tu vida no necesitas grandes pasos.
Sólo pasitos.
A veces, muy pequeñitos.
Pero que, si son constantes, acabarán cambiando tu vida.
Piensa que mientras tengas tiempo, tendrás esperanza.
Nunca es tarde para volver a empezar.
Nunca.
Da igual que tengas veinte, treinta, cincuenta o sesenta años.
Nunca es tarde, digan lo que digan
Deja que el mundo crea, piense o diga.
Tú haz lo que sientas.
Porque si no, cuando a ti te toque marchar de esta experiencia, el mundo seguirá diciendo.
Y tú te lo habrás perdido.
Rafa Mota
Personal Coach
www.rafamota.com
